11/12/11

Las circunstancias impiden un mayor botín

El Córdoba sacó un punto en Tarragona, tras poder ganar y también perder. Tuvo dos clarísimas ocasiones en la primera parte, en la segunda se entonó más en su juego, pero el partido se volvió más bronco por la pasividad del árbitro. Esa actuación paso factura y fruto fue la impotencia reflejada en Charles que vio la roja, a partir de ese momento el Córdoba varió su esquema y el Nástic apretó. Al final el punto supo a gloria.

Hay partidos en los que en los que puedes ganar pero el devenir del encuentro lo marcan las circusntancias que pueden pasar en 90 minutos, que al final de tener un partido controlado, siendo superior al final tengas que guardar la ropa y dar por bueno el empate. Más o menos es lo que le ocurrió ayer a los blanquiverdes.

En todo momento se veía superiores los hombres de Paco, que a pesar de ello, no cuajaban un buen partido, les faltaba esa intensidad y chispa que les caracteriza, sin tener profundidad y en ataque muy solitario Charles. Eso si la defensa impecable. Sobretodo Prieto en su pelea con Viguera.

En frente tenían a un Nástic mejorado con la llegada de D´Alessandro que le ha inculcado su garra y carácter, pero que ayer no tuvo el suficiente peligro para inquitar al Córdoba. Solo el árbitro les echo una mano con la expulsión que les hizo meter en el partido, por mucho que el técnico del Nástic, no lo tuviera tan claro. Quizás por ello era un foco mediático en el famoso Punto Pelota.

Ayer Paco apostó por el mismo esquema que arraso al Alcoyano. La única variante, previsible, era la inclusión de Alberto Aguilar por López Garai, pensando en Copa, y Fernández por Fuentes. Caballero repetía en la medular. Quizás fuera por la variante táctica, pero el Córdoba no estaba cómodo en el campo, le costaba un mundo tener la posesión y tener mordiente arriba, ya que Charles estaba muy solo y cuando baja a recibir, creaba un vació en esa zona.

Los destellos llegaban de un López Silva tocado por una barita que hacia crear peligro por su banda. Suya fue una de las ocasiones más claras del Córdoba. En el pico del área soltó una parábola buscando la escuadra, pero se topo con el poste. Hubiera sido otro golazo para el onubense. Aún así quién tenia la posesión era del Nástic, pero sin crear excesivo peligro, parecía una forma de defenderse en vez de atacar. Lo único de peligro lo creaba Peragón y Viguera ya que le buscaban por su corpulencia en balones por alto.

En el descuento llegaría la acción más clara para el Córdoba, balón atrás de la defensa para el portero Rubén, el esférico no tenia la suficiente potencia y ese hecho lo aprovecho Javi Hervás que lo recogió, plantándose solo ante el área, un tanto escorado eso si, su disparo buscando la escuadra se fue ligeramente desviado cuando lo tenia todo a favor. Hubiera supuesto un mazado para el cuadro grana, ya que hubiera sido una losa demasiado grande y el Córdoba se hubiera crecido en lo que llaman el gol psicológico

En la reanudación, el conjunto cordobesistas salió con más brío, sobretodo por las bandas. Pero el encuentro se iba calentando más y más por la actuación del árbitro que constantemente machaba a los jugadores cordobesistas, sin señalar faltas clarísimas. Aún así el Córdoba tuvo otra ocasión, merced a Férnandez donde Rubén Pérez tuvo que intervenir.

A partir de ese momento, todo cambió, tras la expulsión de Charles, que no aguantó más la pasividad del árbitro y dio la misma medicina que los del Nástic, el problema que el trencilla no midió con le mismo rasero. El Córdoba se quedaba con 10, jugando un 4-3-1-1. Con Quero en la media punta, Pepe Diaz arriba y Hervás en la izquierda.

Desde la expulsión el Nástic vio la posibilidad de hincar el diente al Córdoba, la primera fue en una acción que acabo en gol, pero que fue anulado por fuera de juego, la siguiente a falta de cuatro minutos, donde en una acción parecida al gol, Alberto tuvo que sacar una esplendida mano para evitar el tanto grana. El cuadro tarraconsese apretaba pero los blanquiverdes supo contener la envestida.

Un punto que en un tramo de partido fue escaso y en otro satisfactorio. Aún así el Córdoba en un encuentro flojito, volvió a tener oportunidades de gol, estuvo sólido en defensa y el único pero fue que no desplegó el juego de toque y presión que nos tiene acostumbrados, pero en todos los partidos no puede jugar como nos tiene acostumbrados. La próxima revalida será en Copa ante el Betis, el martes y después cerrará la liga antes del parón ante el Recre, donde tiene que hacer bueno el empate y ganar por fin el derby del hermanamiento.

FICHA TÉCNICA:
NÁSTIC DE TARRAGONA: Rubén, Mingo, Rodri, Álex Ortiz (Eloy, '78), Seoane, Moran (Tuni, '62), Peragon (Luna, '46), Longas, Mairata, Viguera y Sergio Juste.
CÓRDOBA CF: Alberto G, Cerra, Gaspar A., Borja (López Garai, '81), Charles, Fernández, López Silva (Quero, '75), Alberto A., Caballlero (Pepe Díaz, '60), Prieto y Hervás.
ÁRBITRO: Sánchez Martínez (Comité Murciano). Expulsó a Charles por roja directa en el '75. Amonestó por el Nástic a Peragón (‘8), Seoane (`92); por el Córdoba a Javi Hervás (‘8), López Silva (`21)
INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la 17ª Jornada de la Liga Adelante, disputado en el Nou Estadi ante 4.250 espectadores. Un centenar de cordobesistas donde estuvieron reprensantados nuestra peña y la Peña de Santaella. En la que la campaña de recogida de juguetes fue muy exitosa.

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